Se acerca el final de agosto y se nota. Los vecinos vuelven de vacaciones, revisamos la fecha exacta del regreso a clase de nuestros hijos, nos preocupamos por en qué clase los ubicarán y tememos que no estén con sus amigos. Para nosotros también es como volver al cole: volvemos a la normalidad, los correos electrónicos empiezan a llegar de nuevo a nuestra bandeja de entrada y se planifican reuniones. ¡Halala, el verano ya terminó! ¡Qué bueno fue eso! 😊
Ya seas joven o mayor, el comienzo del año escolar marca una nueva era para todos. Este es el momento en el que pensamos en nuevos propósitos, en lo que intentaremos mejorar o incluso desterrar durante este nuevo año que se abre ante nosotros. Los más pequeños tendrán que cambiar de armario e ir a la peluquería para lucir nuevos para la famosa vuelta al cole. Y nosotros los adultos tenemos que volver a un ritmo que casi habíamos olvidado.